lunes, 15 de marzo de 2010

Manos agradecidas

El pasado día 9 de marzo, se inauguraba en Guadalajara, una exposición muy interesante. Manos Unidas pretendía con esta exposición retrospectiva, resumir en unos paneles, con fotos y proyectos, sus 50 años actividad. Y al mismo tiempo, ser una muestra de agradecimiento por la solidaridad de la provincia de Guadalajara y de sus instituciones. La exposición llevaba por título “Manos agradecidas”.

Junto a Pilar, la Presidenta de la Delegación de Manos Unidas en Guadalajara, estaban la Presidenta de la Diputación y la Concejala de Cultura, en representación del Alcalde de la ciudad. Guadalajara es una provincia solidaria. Así se puso de manifiesto, por cada una de ellas. Pero además, esta vez, sus palabras tenían un reflejo en los diversos proyectos de ayuda al desarrollo, que se han financiado desde esta provincia.

Desde que comenzó su andadura en 1960, con un presupuesto de tan solo 500.000 pesetas, esta organización católica, no ha cesado de crecer tanto en la concienciación a la sociedad y de nuestras instituciones, como en la contribución a la causa de lograr un mundo más justo y más humano. Desde siempre el anagrama de Manos Unidas lo hemos visto asociado a Campaña contra el Hambre.
Y es que mediante sus proyectos y campañas ha intentado atajar el hambre de los más necesitados, construyendo pozos, proyectos agrícolas, escuelas, hospitales y brindando especial apoyo a la mujer, en zonas concretas y desfavorecidas de África, Asia y América. Nada menos que 62 millones de euros han ido a parar a esos proyectos.
Esta aportación ha sido posible gracias a la ayuda generosa de personas anónimas (niños y adultos) y a la financiación de instituciones privadas y públicas. ¡No solo de Guadalajara, claro. Para todos, Manos Unidas tiene un enorme GRACIAS.

En su 50 aniversario, pretende relanzar la campaña especial contra el hambre, primer Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODM) de las Naciones Unidas, y una de sus prioridades a lo largo da los años. El segundo objetivo es el medio ambiente. De ahí que su campaña sea: “Contra el hambre, defiende la tierra”. Hay recursos, pero hay que poner los medios. Hay que ganar la guerra al hambre y a la injusticia.

También nos recuerda que desde que se fijó el objetivo de Desarrollo del Milenio, hace 10 años, no sólo no han disminuido las cifras del hambre, sino que se han incrementado en más de 100 MILLONES. Para Manos Unidas, ya no es solo prioridad, es urgencia. La lucha contra el hambre es un proyecto de todos. El apoyo de cada una de las personas particulares, y de todas y cada una de las instituciones, privadas y públicas es también “urgente”.

La Institución vine escribiendo año tras año una historia de solidaridad con los desfavorecidos y sobre todo con los hambrientos, que no podemos dejar de apoyar, a pesar de la crisis. La Exposición es un “gracias”, un aplauso a Guadalajara, pero también una llamada a la conciencia para erradicar, en la medida de lo posible, la pobreza extrema y el hambre. Mañana será tarde. Esos niños, esas mujeres y esos hombres hambrientos, son seres humanos. ¡Manos Unidas necesita que cambiemos para cambiar el mundo!.

PUBLICADO en EL HERALDO DEL HENARES el 15-03-2010; El DIA 21-03-2010

sábado, 13 de marzo de 2010

FAUSTINO


Hay nombres propios, que sólo llegan a la gente, cuando ya no están.
No han ido por la vida haciendo ruido, sino haciendo el bien, dando la mano, acompañando al médico, regalando una sonrisa, compartiendo un pitillo, llevando a algunos mayores al teatro, o a una sesión de ilusionismo y magia.

Conocí a Faustino hace 6 años. Era un voluntario, dispuesto siempre a darlo todo. Era apreciado en su institución. Siempre estuvo dispuesto a colaborar y cooperar. Era un hombre bueno, sensato y altruista.

No tuvo ocasión de marchar al extranjero para contribuir a la cooperación internacional. Pero, desde aquí, cooperaba, y estaba “cada vez más cerca de las personas”, según reza el lema de Cruz Roja.

La última vez que coincidí con él, fue precisamente el día de la Campaña por Haití. Como todos recordaréis, la Diputación había puesto en marcha, una jornada de Cooperación y ayuda a los damnificados por el terremoto, que asoló esta nación tan deprimida. Su colaboración era sencilla: colocar una pulsera en la muñeca de cada una de las personas que accedían al recinto del San José para asistir a los distintos conciertos. No estaba sólo, ciertamente. Era uno más. Pero ahí estaba en representación de Cruz Roja Guadalajara.

¿Cuánto se recaudo?. Lo importante es que lo que fuera se consiguió entre todos.

Pocos días después, se programaba en el Centro Cultural de Ibercaja, un espectáculo de magia e ilusionimo al que podían asistir gratuitamente personas mayores.

Una vez más, Cruz Roja había solicitado la colaboración de algunos voluntarios, para acompañar a personas mayores, con alguna dificultad motriz. Allí estaba Faustino acompañando a unos y ayudando a acomodar a otros.

Y de repente... todo sucedió muy rápido. Desde atrás se pensó que algún mayor, había tropezado. No había comenzado aún la sesión. Era él, que se había desplomado. Por más que los servicios sanitarios hicieron lo posible para reanimarlo, nada se pudo hacer. Había sido fulminante.

El bueno de Faustino, voluntario de Cruz Roja, había muerto en acto de servicio. Siempre había ido por delante.

Algunos se preguntan, si el tabaco pudo influir o ser causa de su muerte. Nada nos sacará de la duda. Si el interrogante sigue ahí, acaso alguien aprenda la lección. Se ha ido muy pronto y sin avisar.

No es muy frecuente. Es decir, es algo extraordinario. Pero la muerte llega cuando quiere. Eso impacta. Escuché a algún compañero en el Tanatorio, a donde habían acudido sorprendidos por la triste noticia: “el modo sobrecoge, pero lo importante y el extraordinario, era él”. Y otro respondió, “¡Estoy de acuerdo!”.

La muerte siempre es una lección sobre la vida.

PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES, el 12-03-2010